Ale, ya que estoy lanzado a poner aquí conciertos y el de ALBERTO ANAUT lo tenemos fresco, ahí va este pequeño recuerdo. Alberto Anaut es un viejo conocido del spyp. Bueno no tan viejo, ja ja ja, del año pasado, pero ya tiene dos etiquetas en ese blog. Pues bien, el pasado 21 de Octubre vino a Logroño invitado por la Gota de Leche (pasta municipal, vaya) a presentar su nuevo álbum TIMES GOES ON (este sí se puede escuchar a gusto en el Spotify). Salió el cierzo y hacía fresco, y como la información musical de esta ciudad es bastante lamentable, había poca gente para el nivelazo de Anaut y del grupo que le acompaña. Y eso que era de gratis. Con decir que al saxo tenor estaba Alberto Arteta, que dio un conciertazo en la Semana de Jazz de Logroño en el mes de mayo, ya nos hacemos una idea.
La tarde era fría y había menos gente de la que se merecía Anaut y su grupo, pero mirad la foto que hice. Parece que no hubiera nadie. Los bafles de los bajos justo al pie del escenario te retumbaban en el pecho y había que ponerse por lo menos a diez o quince metros de los músicos para poder aguantar la brutalidad del sonido amplificado. Eso dejaba al grupo sin el calor del público. Añadamos que la guitarra de Anaut estaba algo baja de sonido respecto a los demás miembros de la banda y que sus solos no brillaban como debieran. Pues eso, que un buen concierto se lo puede cargar una mala sonorización. Me canso de repetir que la música en vivo no sólo depende de la profesionalidad de los músicos y que es una cuestión que tiene que ver con el lugar, con la sonorización, con la organización y con la gente. O sea, con demasiadas cosas para que un concierto sea exitoso.
A modo de anécdota os cuento que detrás mío estaba el propietario y director de la conocida academia musical de Logroño Piccolo y Saxo y cuando entre tema y tema le hice estos comentarios que he dejado puesto arriba (lo de los bafles y el nivel de la guitarra de Anaut) me contestó: "pues yo lo oigo de puta madre...". Hombre, oído parece que tiene este hombre, pero escuchar no parece escuchar mucho, ja ja ja ja.