jueves, 8 de agosto de 2024

THE MOODY BLUES - 1968 - RIDE MY SEE SAW

 



Echando un vistazo a la isla de Wight y recordando los festivales de música que allí se celebraron a finales de los sesenta en la onda del norteamericano Woodstock, di con el nombre de un grupo que me sonaba muchísimo de aquellos años setenta, THE MOODY BLUES, un grupo que después había olvidado casi por completo. Me puse a rastrear sus hits y no tardó en salir el extraordinario NIGHTS IN WHITE SATIN, pero el álbum en que estaba incluido era tan pretencioso, con esas mezclas tan espantosas de sonido de orquesta y músicas incipientemente psicodélicas, que pensé que tenía que haber algo más. 

Di después con un documental biográfico del grupo en youtube y, como no tenía subtítulos, apenas me pude ir enterando de la sucesión de sus cinco o seis primeros álbumes, todos bastante irregulares. Había temas que tenían materiales muy próximos a los que manejaban los Beatles, incluidos también, ay, los temas pachangueros o gamberros tipo Yellow Submarine que estos colaban de vez en cuando entre sus obras magistrales. 

Por suerte encontré en el documental un temazo que lo tenía pegado en la memoria de aquellos finales de los sesenta y que no había vuelto a escuchar desde entonces, RIDE MY SEE SAW, y como es normal me dio un vuelco el corazón. Es el tema con el que abre el álbum IN SEARCH OF THE LOST CHORD de 1968 que he tratado de escuchar entero un par de veces sin conseguirlo, porque hay temas tan malos que da vergüenza ajena seguir hasta el final. Y eso que, como decía, hay momentos de buena música y siempre muy buenas voces. 

En fin, que no voy a perder mucho más tiempo con THE MOODY BLUES, grupo irregular donde los haya.

En la historia de la música moderna hay muchos más grupos de los de uno o dos temas de éxito que de los que tienen la coherencia musical de componer buenos álbumes, así que es lógico que los ilustre con un youtube y ya.

miércoles, 10 de enero de 2024

HEY JOE


Contra lo que es aquí costumbre, hoy no va de un álbum sino de una canción. La escuché tomando un chupito de Baileys en el Ibiza la noche de reyes. Me tocó la fibra, puse el Shazam y  me salió HEY JOE, uno de los temás más versionados de música rock y un tipo de lo más curioso, un tal Willy Deville del que tampoco había oído hablar. La escuché luego una y otra vez y no salía de mi asombro. Ni de mi estado de euforia. Qué temazo. ¿Cómo es posible que haya tardado tanto en llegar a mis oídos?

Paso la noche del 9 de enero oyendo otras cosas de Willy Deville y leyendo esta entrevista que le hizo un tal Miquel Botella Armengou, y que gracias a internet y la generosidad del tal Miquel podemos leer a golpe de un click

Me voy enterando también de los orígenes de la canción y escucho la versión de Jimy Hendrix, la más sonada. Pero Hendrix nunca fue santo de mi devoción. Era un tío feo. Y lo de tocar la guitarra con los dientes me chirriaba. Histrionismo puro. Pero encuentro otras versiones impresionantes: como la de Popa Chubby, o la de Ben Poole (que mejor escucharla sin verle a él, que parece gustarse mucho y aburrir a su bajista...) ...para un público holandés que no parece conectar con los delirios de su guitarra. 

Al final de mi investigación encuentro este vídeo de origen creo que argentino (o platense) que lo cuenta todo sobre Hey Joe (excepto las dos versiones que acabo de nombrar...). Todo un mundo que se merece una spypmusic. Aunque no sea un álbum. Ojalá hubiera dado para ello: